Ciudad
La Legislatura porteña derogó Ordenanzas y Decretos que permitían la muerte de perros y gatos hallados en la vía pública si no son reclamados por sus tenedores responsables luego de tres días a partir de su captura.
Aunque la Ciudad de Buenos Aires tiene en cuenta el cuidado de los animales, la prevención de enfermedades zoonóticas y el control de la superpoblación de perros y gatos por medio de campañas de esterilización quirúrgica gratuita, hasta ahora, la normativa habilitaba el sacrificio de animales domésticos hallados en la vía pública.
La norma también declara a Buenos Aires «Ciudad de Tenencia Responsable de animales domésticos de compañía» promoviendo la convivencia armónica de las personas con los animales domésticos, dentro de una concepción de respeto por la vida y de control de la natalidad de los mismos, de modo de reducir el impacto poblacional.
«Las ciudades que instrumentaron programas preventivos hace varios años, a partir de implementar la educación para la salud y la tenencia responsable de mascotas redujeron sensiblemente la población de animales callejeros y mejoraron el trato ético hacia los mismos», afirman los fundamentos del proyecto.
Existen varias provincias, municipios y ciudades en el país que han desterrado la matanza de animales como método para controlar la natalidad y la salubridad de los mismos, a partir de modificar la legislación, efectivizar el modelo de castraciones masivas y gratuitas, y realizar a conciencia el trabajo de vacunación y desparasitación sistemática sostenida en el tiempo. Tierra del Fuego en el 2005, Mendoza en el año 2006, Chaco en el año 2007, Buenos Aires en el 2008 y San Juan en el 2009 se han incorporado a las jurisdicciones que rechazan la matanza de animales domésticos hallados en la vía pública.
El proyecto presentado por el diputado Edgardo Form tuvo dictamen favorable de la Comisión de Salud y fue aprobado con 58 votos positivos. «Es necesario considerar la esterilización como una cuestión referida a la salud pública, que debe ser garantizada por el Estado, con el fin de controlar la natalidad y regular sanitariamente al animal callejero sin recurrir a sacrificarlo», sostuvo el autor de la iniciativa.