En la avenida Avellaneda siguen los problemas

La tensa situación que ocurría hace unos meses en Flores mejoró con el traslado de los manteros a un galpón de Once, pero en la avenida Avellaneda todavía hay demoras y complicaciones en el tránsito. Por eso, los comerciantes de la zona le pidieron al Gobierno porteño que les proporcione un playón de estacionamiento para albergar a los autos particulares y micros que suelen detenerse hasta en triple fila.

Los vendedores del barrio admitieron que el comercio se reactivó con el desalojo de los puesteros ilegales, que se trasladaron a un predio ubicado en la calle Perón al 3000, entre Ecuador y Jean Jaures. Sin embargo, la satisfacción no fue completa debido a la constante congestión de vehículos que se genera en la zona, sumado a otros problemas como la basura comercial que colma la calle Avellaneda, una de las más transitadas del barrio.

“Hay un predio sobre Gaona que pertenece al Gobierno de la Ciudad. Queremos que nos lo cedan”, le dijo al diario La Nación Ricardo Martínez, presidente de la Asociación de Comerciantes de la Avenida Avellaneda (Acoma), que se haría cargo de su mantenimiento y explotación. El proyecto contempla que el lugar -que abarca tres cuartos de manzana- tenga una confitería, baños y duchas para los choferes.