Barrio de Flores
Volvió a crecer la venta ilegal en la Ciudad. Según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y la Federación de Comercio e Industria porteña (FECOBA), ya existen casi 14.000 puestos, entre saladitas, manteros y “meseteros”, estos últimos instalados con estructuras de mesas, caballetes, cajones y sillas.
De acuerdo a un relevamiento elaborado por las entidades entre el 10 y el 27 de agosto, en ese mes abrieron dos nuevas saladitas, donde se instalaron 69 puestos más. Además, aparecieron 171 nuevos manteros en la vía pública. De esa manera, la Ciudad ya albergaría 125 saladitas con 7.470 puestos y 6.126 vendedores ilegales en la calle.
Los 13.596 puesteros ilegales estimados por la CAME y FECOBA “realizaron ventas por valor de 851,1 millones de pesos, a un ritmo promedio de 32,3 millones diarios”. Desde julio de 2011, cuando se inició el relevamiento, “la cantidad de saladitas se multiplicó 4,3 veces”, precisaron en el informe.
La mayor parte del comercio ilegal se concentra en el rubro indumentaria, que representa casi el 80 por ciento de su facturación. En segundo lugar en ventas están los zapatos y, en tercero, la lencería. Otros sectores relevantes son el de alimentos y bebidas y el de juguetes.
Las zonas de mayor informalidad, indica el relevamiento, varía según el espacio elegido.
Los manteros se despliegan particularmente en Once, Liniers y avenida Avellaneda, “que cada vez más abandonan el tradicional carácter urbano y se convierten en grandes espacios feriales a cielo abierto”.
En el caso de las saladitas, en Floresta hay 90, mientras que en Once (el otro barrio que más tiene) se contabilizaron 20.
Para las entidades, la problemática es cada vez más difícil de resolver porque “los vendedores ilegales gozan de cierto beneficio popular: la gente se va acostumbrando a ellos y los acepta, generando una fuerte demanda que retroalimenta el sistema”.
-
Publicado: 16 / 12 /2024
-
Publicado: 16 / 12 /2024
-
Publicado: 16 / 12 /2024
-
Publicado: 23 / 12 /2024