Más de 150 mil personas disfrutaron de las vacaciones

Entre el 16 y el 31 de julio, el Ministerio de Cultura de la Ciudad convirtió más de 60 espacios culturales entre plazas, teatros, parques, y salas de cine entre otros, distribuídos en 15 comunas, en escenarios de más de 500 propuestas culturales de las que participaron más de 1800 artistas, invitando de manera gratuita y accesible a grandes, chicos y familias a sumergirse de lleno en el arte y la cultura.

Más de 150 mil personas disfrutaron de la enorme y diversa cantidad de propuestas desplegadas por toda la Ciudad.

Hubo talleres y actividades que fusionaron distintas disciplinas artísticas, como teatro, literatura, cine, artes plásticas, danza, escritura y otras, pensadas tanto para niños, como para adolescentes y adultos. Al mismo tiempo, alrededor de 200 mil personas se conectaron con la cultura a través de la web Vivamos Cultura. La plataforma ofreció más de 900 propuestas digitales para disfrutar desde cualquier parte del país, junto a un itinerario día por día con todas las actividades disponibles para que las familias pudieran armar su propio plan.

Las propuestas que fueron pensadas para la niñez buscaron activar los sentidos de los más chicos a través del juego, así como brindar las herramientas para hacer de la práctica artística un medio de expresión. Para los más jóvenes, la agenda buscó abrir espacios donde conectar con el arte para desplegar y estimular la imaginación y la creatividad.

“Siempre hay algo para hacer en la Ciudad tanto para los que vivimos en ella como para los que la visitan. Y más aún en lo que fueron estas vacaciones de invierno en las cuales desplegamos más de 500 actividades en distintos puntos de la Ciudad con el fin de llevar la cultura a todos lados: sacarla a la calle, a los parques y plazas, además de las propuestas de los espacios tradicionales. La cultura nos reúne, es un espacio de encuentro para sentir la ciudad”, expresó el ministro de Cultura de la Ciudad, Enrique Avogadro.

Hubo viajes mágicos a través del teatro y la literatura que propusieron espacios para crear y contar historias, teatro de títeres, clubs de lectura, circo, instalaciones y muestras artísticas, shows performáticos, de magia, musicales, un festival de cine animado, recorridos lúdicos para explorar los subtes, miradores, torres, túneles y tranvías de la Ciudad por medio de los cinco sentidos, un festival de literatura juvenil, una fiesta de actividades en las calles del Abasto, talleres novedosos para aprender sobre arte, búsquedas del tesoro alrededor de espacios históricos, y espectáculos para todas las edades.