Ciudad
Las muertes vinculadas a dicha actividad han impulsado la iniciativa para desplazarlos de las calles. Así lo adelantó el jefe de Gabinete del Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, tras el crimen de un «trapito» frente al Zoológico.
«Tenemos miles de denuncias de aprietes, de autos rayados, que en los recitales pretenden cobrar más de lo que cuesta la entrada. Si un lugar es gratis, es gratis. Hay presión, hay mafias», alegó el funcionario del PRO.
Dias atras, frente al zoológico porteño de Palermo, un «cuidacoches» fue asesinado de una cuchillada, presuntamente por otro «trapito», con quien habría discutido por la propina de un conductor. Hace pocos días, se produjo un episodio similar en el barrio de Almagro. Muchas veces, los cruces se producen por peleas territoriales, según cómo repartirse las cuadras, barrios o inmediaciones de lugares clave, como ser: canchas, teatros, etc.
Este «rebusque» se encuentra dentro de un vacío legal, ya que no está prohibido que una persona se ofrezca a un automovilista para cuidar su vehículo ni que reciba dinero a cambio por esa tarea. Sin embargo, esta práctica ha desarrollado la formación de grupos que, más que ofrecer un servicio de vigilancia, extorsionan a los propietarios de los autos para pagar por estacionar en lugares públicos y gratuitos.