Quedo sin efecto la licitación del Bar en el Parque Chacabuco

Las muestras de desaprobación que tuvo entre los vecinos el proyecto para instalar bares en las plazas lograron su cometido. Finalmente, el Gobierno de la Ciudad decidió dejar sin efecto la licitación de la empresa Bosquimano SA, a la que se le había asignado la realización del primer bar en el Parque Chacabuco.

La ley aprobada en 2014 por la Legislatura porteña establecía la construcción de áreas de servicios en espacios verdes de no más de 50.000 metros cuadrados de superficie. La normativa abarcaba 37 plazas y parques, cuyos bares tenían que contar con baños y estacionamiento para bicicletas, y no podían vender bebidas con alcohol ni cigarrillos.

La primera instalación fue adjudicada a mediados de 2015 para el Parque Chacabuco. Pero las obras nunca comenzaron. Resulta que los vecinos de la zona iniciaron una lucha incansable contra el proyecto. Se reunieron domingo de por medio en la esquina de Asamblea y Emilio Mitre, juntaron firmas y presentaron petitorios para suspender la iniciativa. ¿Qué argumentaban? Que ya había un bar, que ya había baños, que iba a perjudicar a los locales aledaños, que quitaría sectores de verde y que “privatizaría” el espacio público, entre otras explicaciones.

Tales movilizaciones tuvieron sus frutos. “Los vecinos de la Asamblea Parque Chacabuco, trabajando de forma permanente e incansable desde mayo de 2015, con múltiples expresiones fundamentadas, logramos dialogar con representantes del Gobierno de la Ciudad (…) El Ministerio de Ambiente y Espacio Público decidió dejar SIN efecto la licitación”, señalaron los vecinos en un comunicado. Y agregaron: “Seguimos reuniéndonos porque queremos más verde y menos gris”.

Si bien el proyecto de bares quedó en suspenso tras la última reunión con los vecinos, desde la Ciudad confiaron que analizarán nuevas propuestas para el espacio público. Según publicó el diario La Nación, se crearían áreas de servicios con bibliotecas, mobiliario urbano y conexión a Internet inalámbrica gratuita, pero sin el expendio de comida como actividad principal. Otra alternativa que ya está en carpeta es la refacción de los inmuebles abandonados en algunos de los parques, “con el objetivo de preservar la idiosincrasia de la plaza y estar a tono con las necesidades de los vecinos”.