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El Hospital Udaondo y el Hospital Ramos Mejía se suman a la Campaña Nacional de Detección de Hepatitis C. Simultáneamente, 46 hospitales de las 23 provincias argentinas brindarán información, concientizarán y llevarán adelante testeos en forma totalmente gratuita. El virus afecta a cerca de 400 mil argentinos, de los cuales se estima que 6 de cada 10 no están diagnosticados.
Podés acercarte al Hospital de Gastroenterologia “Dr. Carlos Bonorino Udaondo” (Av. Caseros 2061, Parque Patricios) del 4 al 8 y del 11 al 15 de septiembre, en el horario de 8 a 12 hs.
En el Hospital Ramos Mejía (General Urquiza 609, Balvanera), se realizará la campaña los días jueves 7, 14, 21 y 28 y los viernes 15 y 29 de septiembre de 8 a 12 hs, en el hall central del hospital.
La campaña fue lanzada por el Laboratorio Nacional de Referencia para Hepatitis Virales del Instituto ‘Carlos Malbrán’, en conjunto con la Asociación Argentina para el Estudio de las Enfermedades del Hígado (Aaeeh).
Es una campaña sin precedentes en nuestro país, simultáneamente, del 4 al 15 de septiembre, 46 hospitales de las 23 provincias argentinas brindarán información, concientizarán y llevarán adelante testeos en forma totalmente gratuita para detectar pacientes con Hepatitis C.
Hepatitis B y C
Es importante detectar las Hepatitis B y C ya que su evolución genera una infección crónica del hígado que es asintomática y puede ocasionar mortalidad prematura. La disponibilidad de la vacuna contra el virus de la Hepatitis B, le confiere a las personas una prolongada protección contra este virus, también es una oportunidad para prevenir el cáncer primario de hígado. La vacuna contra la Hepatitis B se aplica a toda la población con el objetivo de avanzar en el proceso de control y eliminación de esta enfermedad en la Argentina.
La hepatitis crónica por virus B y C causan el 57% de las cirrosis hepáticas y el 78% de los casos de cáncer primario del hígado entre pacientes con cirrosis. En el caso de la hepatitis C aún no se ha podido desarrollar una vacuna efectiva. Las infecciones crónicas por los virus B o C cuentan con tratamientos específicos con fármacos que pueden controlar la actividad de los virus y también curar la infección.