Ciudad
Una multitud de familias y jovenes fieles de San Expedito, el patrono de las causas urgentes, asistieron este miércoles a la misa celebrada en su honor en la parroquia Nuestra Señora de Balvanera en la ciudad de Buenos Aires para agradecer las promesas cumplidas y pedir por la familia, la salud y el trabajo.
Los devotos de uno de los santos más populares de la Iglesia Católica se congregaron frente al escenario armado fuera de la parroquia, con las manos en alto portando llaves, velas y ramos de Olivo para recibir la bendición de un cura que les arrojaba agua bendita, en una celebración que este año se tituló: «Con San Expedito pedimos por las familias».
El cardenal Mario Aurelio Poli presidió la misa central del día y, ante la multitud, destacó que este día «está dedicado a todas las familias que están en el santuario, y a las cientos que forman la cola de cuadras para venir aquí.»
«Vinieron a dar gracias, a pedir, y queremos rezar muy especialmente por ellas y darles un mensaje: Cristo ha resucitado», expresó el Cardenal.
Durante su mensaje, Poli destacó la importancia del amor en las familias y como el mensaje de Jesucristo apunta especialmente a ellas: «Jesús nos dice ‘Amensé los unos a los otros, como yo los he amado’, un mandamiento que aplica para todos pero fundamentalmente para la familia, porque cuando hay fe y sus miembros se quieren, se respetan, entienden que comparten cosas esenciales en común, es cuando creamos un verdadero santuario de amor”.
“¿Acaso puede mantenerse una familia sin amor y sin respeto? Las familias se mantienen por y gracias al amor, aunque no nos demos cuenta, pasa todos los días, porque todo el sacrificio que hacen los padres y los hijos es por amor”, cerró.
«Yo pido por mi familia, nombro al que necesita y se destraba», contó a la agencia Télam Nélida, de 69 años, que desde hace dos décadas viene desde Merlo a la parroquia ubicada en Bartolomé Mitre 2411, en el barrio porteño de Balvanera, para agradecer, pedir protección para sus seres queridos y milagros a San Expedito.
A San Expedito también se lo considera patrono de los jóvenes, socorro de los estudiantes, mediador en procesos y juicios, y protector de la familia y de los enfermos.